Aprender a decir que NO
La gentileza es complacencia para
el que la recibe, no siempre para el que la da, porque una cosa es presión y otra espontaneidad; y, dar lo mejor de cada uno es
saludable e ideal pero si no lo haces no quiere decir que estés dando lo peor,
simplemente es no querer dar nada. Aquello es parte del significado de ser descomplicado,
además de haber generado conciencia sobre el sentido de merecimiento.
El día de ayer conversaba con un
amigo de muchos temas y por algo en particular le dije: “Hay que aprender a decir que NO”, me contestó que era difícil, y yo
le respondí que menos de lo que parece y le relate mis últimos NO, creo que
luego de eso tuvo otra perspectiva de las cosas, lo vi animado a decir que NO.
Todo debe comenzar por uno mismo,
no podemos rescatar a nuestros seres queridos si eso implica que nos olvidemos
de nuestras labores. El nudo crítico está en que cuando acostumbramos a las
personas a ser sus concierges y en un
determinado momento no los ayudamos ya sea por no poder o no querer,
probablemente seremos catalogados como mala gente. Sería conveniente darle
definiciones a lo que es ser mala gente, pienso
que en otro post lo podemos ampliar evitando al máximo caer en juicios de
valor.
Con todo, ahora diré que las
malas gentes abundan pero no son las que saben decir que NO, por el contrario
son aquellas que diciendo SI a todo, generan malos hábitos en los “cómod@s”. Y
también se podría decir que lo cortés no quita lo valiente, pero es más
valiente cerrar puertas y ventanas a la toxicidad de un@ que otr@ osad@, que
desgastarse en pedidos sin sentido.
Aprender a decir que NO, también es
libertad y que bien que se siente; creo que en mis últimas publicaciones he
venido repitiendo incesantemente el tema de la libertad, pero que le vamos a
hacer si es la base de todo y resultado del autoconocimiento que te permite
saber lo que quieres y lo que no quieres.
Otro de los trasfondos de este
asunto recae en el hecho de que no es necesario ni regla decir NO, la omisión
es mejor, es decir, hacer que no escuchas, que no lees, que no ves, etc., y que
divertido que es, háganlo y verán. Me he convencido que eso se logra cuando te
desprendes de lo poco o mucho que no sea parte de ti, de cuando tienes una vida
interesante que vivir, en fin, son elecciones que dejan buenas sensaciones.
Repito, todo para uno mismo, y
después de eso el resto, y esto no es indiferencia, no es indolencia, no es
egoísmo, son PRIORIDADES y la TÚ eres esa PRIORIDAD. Ahora bien, una cosa es la
gente que tiene maestría es comodidad y en molestar, otra es la que realmente
necesita bienestar, algo importante que no se puede confundir.
Nadie pierde por decir que NO, mientras
que todo se acaba si caemos en el error hacer todo porque SÍ, así que dejemos
las culpas y los miedos, vivamos más sinceros.
Estefanía Villacís G.
muy bien tu artículo, es importante saber decir NO, en cualquier acción de tu vida
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo!!!
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